Marina / Offshore

La IMO rige la normativa aplicable a las espumas que se vayan a usar en el combate de fuegos en barcos. Utiliza para la certificación de las espumas de baja expansión una balsa cuadrada y una aplicación suave contra una pared (IMO Msc/Circ. 1312)
La mayor dificultad de esta prueba radica en el sellado del borde (pues el agua de mar “seca” las espumas) y en el nivel exigido de cara a la resistencia a la reignición.
En cuanto a los espumógenos de alta expansión (IMO Msc/Circ. 670) para los sistemas de extinción en las salas de máquinas, el índice de expansión y el lento drenaje y estabilidad estructural de la espuma con el agua de mar son las propiedades principales a exigir.
Un AFFF-AR Newtoniano al 1% para baja expansión (fuegos de cubierta, remolcadores, etc.) y uno de alta expansión al 2% (para las salas de máquinas) sería la combinación más adecuada.
Creemos que se debería exigir la prueba de fuego a los controles de las espumas utilizadas según la normativa IMO y no solo los datos físico-químicos como pH, densidad, etc.